«Los poemas de Cecilia Pavón ya estaban ahí, en fotocopias, plaquetas, libritos; antes de las redes sociales, antes de la banda ancha y de las zonas wi-fi, estos textos circulaban entre nosotros. Las frases, las sentencias de esos poemas venían de un futuro y se proyectaban, se siguen proyectando, en todas direcciones. Estar sin la poesía de Cecilia Pavón es, ahora lo sé, como estar sin internet: algunos podrán vivir sin ella, pero la idea de prescindir de una expericencia vital, de una conexión absoluta con el mundo, para mí es desoladora».

Damián Ríos

«Amo esta poesía salvaje, desafiante, que nos amenaza hasta la tentación. No hay nada aburrido en el mundo, a gran velocidad todo se vuelve atractivo y absurdo. Este libro tiene el efecto de una droga apocalíptica».

Gabriela Bejerman